El "Ronqueo", una ceremonia culinaria fascinante y precisa, es una técnica de despiece del atún que ha cautivado a los amantes de la gastronomía en todo el mundo. Originaria de las costas andaluzas, esta práctica tiene lugar durante los meses de abril y mayo, coincidiendo con la época álgida de la almadraba en Conil.

Durante la Fiesta Gastronómica del Atún, los visitantes tienen el privilegio de presenciar el ronqueo en vivo, una experiencia que despierta los sentidos. Expertos pescadores exhiben su destreza, desglosando el atún con movimientos precisos y meticulosos. Con un cuchillo afilado, realizan cortes específicos para separar las distintas partes del atún, revelando los cortes nobles como el ventresca, el tarantelo y el lomo. Cada movimiento es un tributo a la habilidad y experiencia acumulada durante generaciones.

El ronqueo es más que una técnica; es un arte que celebra la riqueza del atún y honra el respeto de Conil por el mar. Los espectadores quedan maravillados al observar cómo los pescadores transforman un gigante del océano en una serie de exquisitos platillos, desde sashimi fresco hasta suculentos guisos. Este ritual, llevado a cabo con maestría, resalta la conexión profunda entre la tradición pesquera, la gastronomía y la comunidad local.

Asistir a un ronqueo durante la Fiesta Gastronómica del Atún es una ventana única hacia la cultura y el arte culinario de Conil. Los turistas se sumergen en esta experiencia sensorial, explorando los sabores auténticos de un atún capturado fresco, mientras son testigos de una tradición centenaria que cobra vida ante sus ojos.